lunes, 23 de marzo de 2009

Postpirenaica

Pirineos. Huesca. El valle de Tena. Formigal.
Buen tiempo y mejor entorno. Todos a por los esquies y yo, como soy más guai y original que nadie, me hago con unas raquetas y a patear recreándome con el privilegiado paisaje que uno puede admirar por esos lares.
"Ale, a subir esa montaña por la que baja esa gente con los esquíes."
Sudor, cansancio, la gente mirando desdeñosa desde los telesillas, la nieve salpicando y cayéndome en el careto...
"Pero, ¿qué hago con unas raquetas y subiendo a pie por la montaña?"
Tras una bajada tan poco glamurosa como accidentada, no tenía dudas de que me tenía que hacer con unos esquíes. Y eso que mi Ángel bueno todavía lo intentaba:
"No lo hagas Jorge, que luego te vicias y te pasa lo mismo que te pasó con el vino!"
No me pude resistir. Claro. Por la tarde me había calzado los esquíes y las correspondientes botas del infierno. Cuatro o cinco castañas después, me había hecho con la cuña. Y un par de días después ya no frenaba contra la gente haciendo cola. Como un campeón. Y por no estresarme, dejaré el doble tirabuzón listado para la próxima temporada...
Aparte del esquí, hubo que acercarse un día al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Bueno, otra maravilla. Subidita con algo de pendiente rodeados de robles, pinos y chopos, por un camino de un metro de ancho y uno kilómetros después, nieve. Unos centímetros primero, pero al poco hundíamos la pierna hasta las rodillas. Imposible continuar sin unas raquetas, pero lo disfrutamos de lo lindo.
¿Y qué mejor para descansar de una caminata por los Pirineos? Pues un Spa de los Pirineos. Clarísimo. En Sallent de Gállego. Y después, por la noche, qué mejor que un chuletón para recuperar. Un chuletón, como no, de los Pirineos, en Tramacastilla, con los pucelanos, que estaban por ahí. Acompañado por un Arzuaguita...lo mejor del mundo.
Bueno, que ha sido un puente muy aprovechado. En especial ha sido aprovechado por una bacteria que se lo ha currado pero bien. Sí, el jodío bicho me ha pillado desprevenido. Yo que estaba tan feliz sin saber qué eran los esquíes, sin conocer ninguna sensación positiva asociada a tener unas tablas planos en los pies y caminar por ellos sobre la nieve. Sí. Me ha contagiado la dichosa bacteria esa de la que pocos se libran una vez la han probado.
Parda la ha liado la jodía.

1 comentario:

+X dijo...

Es una bacteria muy peligrosa y contagiosa. Espero verte el año que viene por esas pendientes de Dios.

Ya te tengo agregado a mi lector RSS.

Saludos

+X